Al buen tiempo, mala cara
En el estudio de previsiones climatológicas del Reino Unido de 2018 se apunta que en 2070 la temperatura en verano podrían subir hasta 5,4 °C.
La probabilidad de que los veranos sean tan calurosos como el de este año (2018) es actualmente del 15-20 %. Este porcentaje aumentará hasta el 50 %, lo que significa que puede que ocurra o puede que no.
Los veranos más cálidos también serán más secos, con una reducción del 47 % de las precipitaciones en esta estación.
Desde 1990, revertir el cambio climático ha sido una prioridad para Gran Bretaña y se han logrado recortar las emisiones en un 40 % manteniendo el crecimiento económico. Pero el naturalista sir David Attenborough afirmó hoy que el cambio climático es la peor amenaza a la que se ha enfrentado la humanidad en miles de años. Famoso por ser el presentador de reconocidos programas de historia natural (La vida en la Tierra, Planeta Viviente, Planeta Azul, Planeta Tierra, Planeta Helado, etc.), sir David Attenborough ocupa el «Asiento de todos» en el congreso COP24 celebrado en Katowice (Polonia). Y habla sin tapujos: «Si no tomamos medidas, nuestra civilización se derrumbará y se extinguirá la mayor parte del mundo natural».
Mientras los gobiernos tratan de limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 °C, las compañías de agua deben prepararse para el impacto que tendrá este incremento. En el Reino Unido, un mayor nivel de precipitaciones en invierno puede que no sea suficiente para compensar la sequía en verano. El objetivo del 15 % de reducción de fugas establecido para el periodo de gestión del agua n.º 7 (AMP7) será de gran ayuda.
Asimismo, las soluciones de i2O mitigan el riesgo de sequía y reducen las fugas, fallas y costos energéticos y operativos (con la consiguiente mejora del servicio al cliente y la mayor vida útil de los activos), ya que permiten: dotar a la red de los dispositivos necesarios; extraer la máxima información útil de los datos para identificar, diagnosticar y resolver problemas con mayor rapidez, así como realizar el mantenimiento de los activos en base a su estado (y no al tiempo); gestionar las incidencias con mayor eficacia y sacar conclusiones; y mantener la presión en niveles mínimos viables. O, lo que es lo mismo, instalar dNet, iNet, eNet y oNet.
Tags: Blog, i2O, Oriente Medio, Asia Pacifico, Norteamérica, África, Desafíos en la industria, Europa, Reino Unido